Bien temprano me he levantado, he desayunado ese desayuno indio del bar de abajo y he ido al lugar indicado por la guía a coger el bus para las Batu Caves. Allí había cambiado todo, no existían más los autobuses que decía el Lonely Planet y he tenido que improvisar… La verdad es que se me da bien, pero se sufre un güebo… Después de concretar el autobús que iba para allá, me he montado y luego he tenido que cambiar dos veces de autobús…
Cuando he llegado, me parecía estar en la India una escalinata de 272 peldaños que en enero y febrero, creo, se llenan de fieles hindúes medio masocas que se cuelgan cosas rarísimas de agujas y ganchos y llenan a rebosar la escalinata… Ahora estaba más vacía y mi fiebre me hacía que no disfrutara como debiera, así que en unas horas me he ido… Eso si, hay tantos monos y tan respetados que deambulan por doquier...
Al llegar a la habitación me he quedado durmiendo hasta las tres y luego me he levantado para comprar un adaptador…
Gracias a eso puedo estar escribiendo esto ahora… Luego, con una buena conexión a Internet puedo pasarlo al Blog, después de guardarlo previamente en el MP3 con fotos y texto… Ahora me encuentro tan malo, que me voy a echar un rato y a ver alguna película… He apagado el ventilador, pero la nariz me moquea un montón y toso y estornudo de vez en cuando… ¡La hice buena en el fantástico aeropuerto de Kuala Lumpur… Tengo que comprarme paracetamol, no me traje…
Hasta otra…
No hay comentarios:
Publicar un comentario