Me he levantado relativamente tarde, a las 9:00 y pico y luego he ido a cambiar. El índice estaba algo más bajo que ayer, pero espero no tener que cambiar en los cuarenta y seis días que me quedan en Indonesia. He hecho el suficiente acopio de rupias (o eso creo) como para no pasar por un cambista o banco en lo que quede… He comprado tres cartones de leche (dos con chocolate), una botella de agua mineral y aceite de cajuput, que es una especie de “vicks vaporub” local que mucha gente usa por aquí y que es muy bueno para casi todo, pero especialmente (por su efecto balsámico) es indicado para la respiración y como alivio o prevención de resfriados…

A la vuelta, dejo lo comprado en la habitación y cuando salgo al patio encuentro a Lina con los ojjillos de recién levantada y tan bonita como de costumbre. Al rato, la austriaca llega y las dos se ponen a desayunar… Me siento a la mesa y hablamos… Lina me aconseja un hotel barato y de atmósfera agradable en Yogyakarta, donde voy mañana. Más tarde me pide mi e-mail y se lo doy. Hablamos sobre fotos e Internet, ella lamentándose de que la Red ha terminado abocada al negocio más puro y obsceno y yo replicándole que era normal, ya que la Red era como una playa desierta, inexplorada y bonita y el capitalismo no puede dejar de “ocupar” los sitios más bellos, más necesarios o más útiles… Es una lástima no tener más tiempo para entablar algo más de amistad…

Intento mandar la actualización del BLOG, pero no hay manera, ni siquiera se puede acceder a la página. Tras media hora de intentarlo, desisto, pago y me voy… ¡Y estamos en la capital del reino! Esperemos que en Bali…

Por la tarde ha llovido de lo lindo. He pedido para comer un “Mei” con huevo, pero esta gente (que por cierto, no sé si he dicho que son cristianos) tenían reunión con su extensísima familia y no tenían tiempo. Se reúnen a menudo, comen juntos y se ponen a cantar canciones religiosas en su idioma… Parecen una gran familia feliz… Fuera he comido unos pinchos de pollo con salsa, chili y un arroz que parecía patata y que estaban riquísimos. Luego a la vuelta, en la habitación, me he puesto a leer algo del libro de “What the Buddha taught” de Walpola Rahula y he decidido resumirlo para el web site. También me he dado cuenta que debo de escribir en inglés y tratar de aprender y estudiar algo más este idioma… Espero tener tiempo en algunas de las estancias largas que tenga en este viaje…

Luego me he puesto la peli de “The Message”, de la que estoy casi aprendiéndome los diálogos… :-)