Pero lo primero fue ir a comprar el billete en la terminal de autobuses para mañana… Nos vamos a Encarnación, en donde se alojan las ruinas de las misiones jesuíticas… Un tipo paraguayo me ha vendido el billete y lo he pagado en reales brasileiros…
Luego he cogido el autobús para la estación de bus central y de ahí, he cogido otro bus para el parque… En la entrada he conocido a una guía oficial que habla un español con acento argentino de la región de Misiones... Se llama Amelia y hemos hablado largo y tendido... La mujer es de origen finlandés, aunque no habla ni jota de ese dificilísimo idioma, y tiene algunos problemas familiares relacionados con la salud de uno de sus nietos que aquí no vienen a cuento poner por respeto a nuestra conversación...
Las cataratas brasileiras son muy bonitas también, aunque no se experimentan tan cerca como las del lado argentino… Las mariposas andan por doquier posándose, mansas como corderitos, en cualquier lado…
Desde luego, las mejores fotos panorámicas se obtienen desde esta orilla… En este post expongo algunas...
Las infraestructuras brasileñas son mucho mejores que las argentinas y además hay varias construcciones para poder apreciar con más detalles las aguas...
Sobran palabras... Unas imágenes valen más que miles de ellas... ahorrémonos rollo... este día solo ha habido rollete interior...
Como ayer, las mariposas disfrutaban más del ambiente que todos nosotros los humanos... Una de ellas se ha subido a mi mano y se ha dejado fotografiar como una estrella posando encima de uno de mis dedos... Nunca había visto una cosa parecida... :-)
Al irse poniendo el día he vuelto al hostel dando vuelta para comprar comida para mañana, día de viaje… Me he dedicado, una vez en mi habitación, a arreglar mi equipaje y luego, me he quedado (prevenido con los ronquidos de Luis) en el sofá toda la noche… El estúpido alemán ha querido que Jairo y yo fuéramos a cenar con él, pero hemos pasado con una excusa más o menos creíble...
Mañana a Paraguay... Hasta pronto Brasil, espero verte al final de mi trayecto...
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