Día soleado y en el Cristo Redentor de Corcovado… Al principio de la mañana desisto de ir andando y cojo el 584 (tras preguntar un portero sobre cuál es el mejor bus para ir), que me deja en la puerta del tren de cremallera para la cumbre…
Hay unas españolas en la cola de los billetes y comentan que el tren cuesta 35 euros, les corrijo, son 35 reales, las chavalas se rien... Más arriba, tras echarles una foto con su cámara, las dejo para poder ir yo solo a mi arire... Son de Madrid y muy simpáticas, pero no tengo todavía muchas ganas de "socializar"...
Hay una vista maravillosa de Río… No paro de echar fotos hasta que lleno la tarjeta de 8Gb… Pienso qué es lo que sintieron los primeros portugueses al llegar a esta fantástica bahía por primera vez… Seguro que no podían creer en la belleza natural que tenían ante sus ojos...
Hay unas españolas en la cola de los billetes y comentan que el tren cuesta 35 euros, les corrijo, son 35 reales, las chavalas se rien... Más arriba, tras echarles una foto con su cámara, las dejo para poder ir yo solo a mi arire... Son de Madrid y muy simpáticas, pero no tengo todavía muchas ganas de "socializar"...
Hay una vista maravillosa de Río… No paro de echar fotos hasta que lleno la tarjeta de 8Gb… Pienso qué es lo que sintieron los primeros portugueses al llegar a esta fantástica bahía por primera vez… Seguro que no podían creer en la belleza natural que tenían ante sus ojos...
Hay un momento, mientras estoy tomando una vista del paisaje, en el que oígo una corneta tocar... Es un señor de la provincia brasileña de Acre, fronteriza del Perú... En el gran cuerno tiene colgada la bandera de su estado... Su pinta es bastante indigena... No puedo evitar el grabarlo... Tampoco puedo resistir el colgar el vídeo en la entrada de hoy al BLOG... Ahí está algo más arriba...
Bajo a las 15:30 (ya lo he dicho) con la la tarjeta de la cámara agotada… La mejor luz se queda para el final. Como siempre, el sol de la tarde baña de un bello color dorado la atmósfera… No obstante, la nubes amenazan con estropear la magia del momento...
Para la vuelta, cojo el bus 569 hasta la Plaça de Nossa Senhora da Paz… Me acerco paseando hasta el puesto de tapioca y me tomo uno de queso y pollo con orégano… A la llegada, me acerco a Internet y tras remolonear un ratito, me marco una ida temprana a la cama…
Bajo a las 15:30 (ya lo he dicho) con la la tarjeta de la cámara agotada… La mejor luz se queda para el final. Como siempre, el sol de la tarde baña de un bello color dorado la atmósfera… No obstante, la nubes amenazan con estropear la magia del momento...
Para la vuelta, cojo el bus 569 hasta la Plaça de Nossa Senhora da Paz… Me acerco paseando hasta el puesto de tapioca y me tomo uno de queso y pollo con orégano… A la llegada, me acerco a Internet y tras remolonear un ratito, me marco una ida temprana a la cama…
Intento escribir pero me duermo…
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