lunes, 22 de diciembre de 2008

Mendoza...

Una vez pasada la frontera nos volvimos a acurrucar en nuestro asiento hasta llegar a Mendoza… Desde la terminal de esta ciudad, tomamos un bus hasta la Plaza de la Independencia…

El Hostel Independencia, que es el que había elegido, estaba a un escaso centenar de metros, justo al comienzo de un denominado Paseo del Estado de Israel, marcado por un enorme candelabro de siete brazos… Hubo que esperar un poco a que fuera la hora del check out, el ordenador estaba en un rincón que estaban pintando y no se pudo utilizar…

Tras dejar los bártulos, me presentan a un español de Palencia que estaba en Mendoza visitando a unos parientes argentinos y pasando las navidades con ellos… El pariente llegó algo más tarde, un viejo de tendencias peronistas, charlatán por los codos y bastante “de la tierra”, había nacido allí y se le notaba…

Salgo a dar una vuelta y paso por la terminal a reservar bus para Córdoba… En los alrededores veo un hostal cercano a la estación y pienso que hubiera estado bien coger este alojamiento… Mendoza es una ciudad encantadora en extremo, en donde sería muy apetecible vivir… Volvemos enseguida a dormirla, nada más ponerse el sol, las fronteras son un desgaste total de energía…

No hay comentarios:

Publicar un comentario