Camino a Sucre

Hemos cogido el autobús a las 9:30… En el camino a Sucre, hemos dormitado algo… Tras unas cinco horas hemos llegado a nuestro destino y hemos buscado alojamiento cerca de la estación… Hemos dado con un hostel de los recomendados en la Lonely Planet, afiliado al Hostelling International (tengo el carnet que me ofrece el 10% de descuento) y, como voy comprobando en este viaje, la famosa guía tan útil en países asiáticos (especialmente India), se ha lucido con la recomendación… El hostel andaba sin agua y han prometido que en unas horas estaría arreglado el problema… Odio los hosteles del H.I., siempre algo más caros de lo normal, llenos de niñatos de países ricos que solo buscan “conocer otros viajeros”… Algunos se pasan el día metidos dentro, sin mucho interés en la cultura del país que visitan y, por supuesto, la mayoría no saben hablar ni jota del idioma local (en este caso español) y charlando tonterías solamente en inglés… Este solamente es el objetivo de gran parte de los viajeros jóvenes que andan por el mundo… Les interesa solo contar historias de viaje y son unos autenticos analfabetos funcionales… Eso sí, se sienten superiores a la gente local, aunque intuyen que ellos mismos ostentan una cierta estupidez e ignorancia y por ahí puedes achantarlos cuando te dan el follón de más… Esta es la generación “post-Bush”, el despojo más grande de la opulencia occidental… ¡¡¡PUAG!!!

Es por eso que he reservado para mañana alojamiento en el cercano “Residencial Gloria” (extraña y curiosamente también recomendado por la guía L.P.), que ofrece habitaciones limpias, luminosas (con agua) y, este caso, con TV con cable, cosa que se agradece de vez en cuando para poder recibir noticias del país de uno…

Sucre es una bella ciudad. No me ha impactado tanto como Potosí, pero es también preciosa… He callejeado algo hasta el atardecer (tras la llegada quedaban pocas horas de luz) y luego nos hemos vuelto al hostel del H.I. donde (me lo esperaba) todavía andaban de lío con el agua… Demasiado precio solo por codearme con niños pijos angloparlantes… Mañana cambiaré, sin ninguna pena, a un hostel mejor y más popular… No soy en esto nada original, los viajeros con curiosidad y respeto por la tierra que visitan (aunque minoría), suelen hacer lo mismo que yo… La única excusa es que hoy andaba demasiado cansado como para ir buscando alojamiento y he decidido dejar los petates cuanto antes…

Por supuesto, he dormido como un tronco…