Temprano, hemos ido Vittoria (la italiana que queda de la peña del barco desde Manaus) y yo al puerto a preguntar por pasajes a la ciudad de Macapá (está decidido), capital de Amapá, uno del os estados más al norte de Brasil… Atravesado por el ecuador y pegadito a la Guyana Francesa y al Atlántico… Hemos regateado y comprado un boleto para dicha ciudad…
Nos ha dado tiempo de dar la última vuelta antes de la salida del barco… Yo he ido a comer algo y a visitar una de esos templos (de no importa que creencia) que me gustan a mí… Tras esto hemos ido a recoger el petate al Hotel y nos hemos acercado a la nave…
La salida ha sido con retraso… La parte buena es que la comida está incluida… Apoyado en la baranda del barco he visto la tierra alejarse y dejar atrás puerto y embarcaciones en la ciudad de Santarem… Ha sido bonito conocerla…
De nuevo el mar de hamacas, esta vez algo más cutrecillas, inundando la cubierta del barco… Están más pegadas las unas de las otras y esta noche vamos a dormir bastante apretaditos…
Vittoria me ha echado una foto por sorpresa mientras descansaba, tomando fuerzas para la noche y reponiéndome del día… No está mal conocer como viaja la gente local del amazonas, pero me he prometido que la próxima vez que vuelva a la zona, navegaré en un barco de lujo y en camarote de primera… :-)
Al fin y al cabo, yo viajo como una vía de sabiduría y conocimiento (ambas, cosas de las que no ando muy sobrado), entonces ciertas incomodidades son necesarias para entender… Mis viajes no son unas vacaciones, sino (eso creo yo) una peregrinación hacia la LUZ…
Y hablando de Luz, la del crepúsculo, ha curado todos mis males pasados, presentes y futuros… :-)
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